Zaara

Esta es una historia mal contada y siempre lo será, si bien es cierto cada vez que cuento una historia me refiero a "ella", pero creo que es el momento exacto de que “ella”, sus realidades y sus espejismos sean respetados. Desde ahora en adelante dejaré de llamarla solo “ella”, "ella” ahora tendrá un nombre, tal vez real; tal vez fingido, tal vez bonito; tal vez grotesco, tal vez humano; tal vez malo, pero eso da lo mismo, de todos modos eso a quien le importaría.

Zaara, es una chica arraigada siempre a mostrar la anomalía, el otoño en sus pestañas y en su cama...pero como instinto, siempre ha luchado contra eso que le hace parecer triste y sin variedad aunque en el fondo Zaara sabe muy bien que no lo es, muy por el contrario se sabe guapa y destacada. Es apasionada de un grupo de melenudos y de darse baños de tina oyéndolos, Zaara tiene una búsqueda incesante de idiosincrasias, a veces es fastidiosamente susceptible otras oscuramente malvada, hay días en que odia que la miren en la calle, otros tan solo que haya gente en la calle. Vive de dieta en dieta y de bar en bar, la noche siempre a sido su aversión y su más fiel compañía, no quiere llegar a los 30 y necesariamente procura no hablar de ello, no tiene muchos aliados ni los quiere tampoco, un par de chicas la siguen en la obtusa y frágil línea de la subsistencia desde hace muchos años, a ellas Zaara podría llamarlas amigas, pero solo podría.

Zaara es de esas personas que siempre olvida todo y que todo le da igual, nunca va a aceptar su realidad y peor aun pues en realidad puede que no tenga realidad. Habla siempre en un meta-idioma como dijo alguien por ahí asertivamente y lo hace con afán, aunque en realidad solo tenga graves problemas de redacción y de disociación de tiempo/espacio/análisis. Pero eso a quien le importaría.

Comienza la historia...la verdadera historia. Aunque la verdad es relativa y confusa y de veras muy confusa sobre todo para ella... Zaara, desde hoy le dará sentido al nombre de ésta pagina y sobre todo encenderá las pantallas con sus más emponzoñas vivencias, desprendimientos y lascivias…tal vez no vividas…Quien lo sabes y de todos modos eso a quien le importaría.